¿Cómo bendice hoy Dios a América?

Hoy en día, es muy común para los Pastores hablar de como Dios bendice a los Estados Unidos de América. Aún con el ataque a nuestro pais recientemente, los religiososo opinan rápidamente que Dios está maldiciendo ésta nación. Muchos ven a los Estados Unidos como una “Nación Cristiana” y por lo tanto como una nación escogida por Dios. Otros piden a los Estados Unidos que se arrepientan para que Dios pueda mandar sus bendiciones a nosotros y para que no mande o derrame su ira. Pero, también, otros motivan a nuestros líderes políticos para que apoyen a Israel para que Dios bendiga nuestra nación.

¿Todo esto representa en verdad como Dios trabaja en ésta era de la Gracia? ¿Son las bendiciones hoy en día basadas en ser parte de una nación especial, o provienen de otra forma?

La Bendición de Israel

Empecemos por entender que la bendición nacional de Dios era sólo eso, bendición otorgada a la nación física que procedió de Abram.

GENESIS 12:1-2 Pero Jehová había dicho a Abram: de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Y haré de ti una nación grande, y te bendiciré y engrandeceré tu nombre, y serás bendición.

En ese pasaje anterior, es claro que la nación de Israel iba a ser incluída de la semilla fIsica de Abram. En tiempo, es revelado exactamente cuales hijos de Abram recibirían la bendición prometida en Génesis 12. En su Epístola de Romanos, Pablo explica la progresión física de su promesa.

ROMANOS 9:6-13 No que la palabra de Dios haya fallado; porque no todos los que descienden de Israel son Israelitas, ni por ser descendientes de Abram, son todos hijos; sino: En Isaac te será llamada descendencia. Esto es: No los que son hijos según la carne son hijos de Dios, sino que los que son contados como descendientes. Porque la palabra de la promesa es esta: Por este tiempo vendré y Sara tendrá un hijo. Y no sólo esto, si no también cuando Rebeca concibió de uno, de Isaac nuestro padre ( pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permanceciese, no por las obras sino por el que llama ) se le dijo: El mayor servirá al menor. Como está escrito: A Jacob amé, mas a Esau aborrecí.

En éste pasaje, vemos muy claramente como la herencia de Abram fué pasada a Isaac, no a Ismael y de Isaac a Jacob, no a Esaú. Por lo tanto, la línea física de herencia es atravez de Abram, Isaac y Jacob. Pero, en el primer verso del pasaje anterior, vemos una indicación donde la línea física no es la única materia a ser considerada. En el verso séis, vemos que dice que no todos los que son de Israel son Israelitas. Israel es el nombre que Dios le dió a Jacob en Génesis 32:28. En otras palabras, Pablo nos está diciendo a nosotros que no todos los descendientes de Jacob eran parte de una verdadera nación, la nación de Israel. Se requiere algo mas. Veamos como el el libro de Deuteronomio Moisés está contando con la ley a Israel.

DEUTERONOMIO 10:15-16 Solamente de tus padres se agradó Jehová para amarlos y escogió su descendencia después de ellos a vosotros, de entre todos los pueblos, como en éste día circuncidad, pues, el prepucio de vuestro corazón, y no endurezcáis más vuestra cerviz.

Nóte como Moisés le dice a Israel que aparte de la circuncisión física, que vino por ser descendientes de Abram, Isaac y Jacob, ellos necesitaban circuncisar sus corazones. Necesitan de una circuncisión espitirual. Este es el mensaje que Juan el Bautista dió a Israel cuando preparaba la llegada del Mesías.

MATEO 3:5-9 Y salía a él a Jerusalén y toda Judea y toda la provincia de alrededor del Jordán, y eran bautizados por él en el Jordán, confesando sus pecados. Al ver él que muchos de los fariseos y de los saduceos venían a su bautismo, les decía: ¡ Generación de víboras !, ¿ Quién os enseñó a huir de la ira venidera ? Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento y no penséis decir dentro de vosotros mismos. A Abram tenemos por padre; porque yo os digo que Dios puede levantar hijos a Abram aún de estas piedras.

El Apóstol Pablo luego describe al “ verdadero Judío “ en el libro de Romanos.

ROMANOS 2:28-29 Pues no es judío el que lo es exteriormente, ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne; siendo que es judío el que lo es en lo interior y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra, la alabanza del cual no viene de los hombres, sino de Dios.

En éste grupo, la gente que no es físicamente descendiente de Abram, Isaac o Jacob. Pero son también espirituales de la fe de Abram, que son los verdaderos descendiemtes de las promesas de Abram. Este es el grupo de gente el cual Cristo, en su ministerio terrenal, prométe el reinado y por lo tanto toda la herencia de Abram.

MATEO 21:43Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado de vosotros y será dado a gente que produzca los frutos de él.

LUCAS 12: 32 No temáis, manda pequeña, porque a vuestro Padre le he placido daros el reino.

Los verdaderos herederos de la promesa de Abram son los miembros de la “ pequeña manda ” de creyentes que Cristo llama a ser sacados a fuera de la nación de Israel. Estas personas son tanto física como espiritual descendientes de Abram. Esta gente, dirigida por Pedro y por los otros once Apóstoles, quienes mandarán y reinarán con Cristo en la tierra cuando El regrese y establesca su reinado.

La promesa nacional hecha a los descendientes de Abram no puede ser aplicada a los Estados Unidos de América. Los Estados Unidos de América fueron fundados y por su mayoría, está habitada por Gentiles que no son físicamtne descendientes de Abram atravéz de Isaac y Jacob. Pero muchos en nuestra nación son creyentes, por lo tanto, hijos espirituales de Abram (ver Romanos 4); eso no nos hace, ni a nuestra nación, recipientes de las promesas físicas de Abram.

La bendición de la Ley

Otro punto que debemos decir concerniente a la bendición de Israeles que fué condicional. La bendición de Israel fué condicionada por la obediencia a las Leyes de Moisés descansada en la Ley en Deuteronomio.

EXODO 19:5-6 Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos, porque mía es toda la tierra. Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes y gente sana. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel.

DEUTERONOMIO 6:24-25 Y mandó Jehová que cumplieramos todos estos estatutos, y que temamos a Jehová nuestro Dios, para que nos vaya bien todos los días y para que nos conserve la vida, como hasta hoy.

Nóte como la palabra clave en los pasajes anteriores es “SI” . “SI” Israel permaneciera con la ley, ellos se convertirían en un reinado de minístros. “SI” Israel pudiera “hacer” todos los mandamientos, éstos serían justos. Probablemente, la major condición de la naturaleza de Dios con su relación con Israel sobre la ley la encontramos en Deuteronomio 28. El tiempo no nos permite escribir todo el capítulo. Pero los que leén verán al leér por sí mismos en su propia copia de la Palabra de Dios. Ahí Dios dá a Israel un listado detallado de lo que él hará cuando ellos hayan obedecido y lo que él hará cuando desobedescan.

Muchos han tratado de quitar las bendiciones y malas palabras de las leyes, y las quieren aplicar a los Estados Unidos de América. Comoya hemos visto. Los Estados Unidos de América no califica como una nación escojida por Dios, porque no somos físicamente descendientes de Abram atravez de Isaac y Jacob. Adicionalmente, vivímos ahora en la Dispensación de la Gracia. Este es un tiempo en el cual Dios no opéra basado en el desempeño del sistema de la Ley. Sino que opéra basado en los principios de la Gracia.

ROMANOS 3:20-21 & 28 Ya que por las obras de la ley, ningún ser humano será justificado delante de él; porque por medio de la Ley es el conocimiento del pecado. Pero ahora, aparte de la Ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas…..Concluimos, pues que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley.

ROMANOS 6:14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.

En la era de la Gracia, Dios no está bendiciendo o maldiciendo a los Estados Unidos de América ( o a ningún otra nación o persona ) basado en su obediencia hacia la ley. Nuestra bendición hoy en día proviene por la fe en la labor terminada de Crsto ( más de esto después).

La bendición de los Gentiles

En adición de recibir bendiciones de Dios, Israelfué canalizada a ser bendecida de los Gentiles y su nación. Esta condición de bendiciones se mencionan en la conclusión de la promesa de Dios a Abram en Génesis 12.

GENESIS 12:3Bendeciré a los que te bendijeron, y a los que te maldijieron maldiciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.

Las naciones de los Gentiles fueron bendecidas en respuesta al trato de Israel. Dios bendijo a los que bendicieron a Israel y Dios maldecirá a los que maldijieren a Israel. Este principio nació cuando Dios trataba con los Gentiles tanto los que estaban bajo la ley y los que presentó Jesús en su reinado en su ministerio terrenal.

Bajo la Ley, “Rahab” recibió bendiciones de Dios porque ella bendijo a la nación de Israel. En Josué 2, veremos como Rahab escondió a el hombre que Josué mandó para espiar a Jerico (vea Josué 2:1-21) luego, cuando Dios destruyó Jerico, Rahab fué premiada por sus esfuerzos en honor de la nación de Dios.

Josúe 6:20-22 & 25 Entonces el pueblo gritó y los sacerdotes tocaron las bocinas; y aconteció que cuando el pueblo hubo oído el sonido de la bocina, gritó con gran vocerío y el muro se derrumbó. El pueblo subió luego a la ciudad, cada uno derecho hacia adelante, y la tomaron. Y destruyeron a filo de espada todo lo que en la ciudad tenía.

Había hombres y mujeres, jóvense y viejos, hasta los bueyes, las ovejas y los asnos. Mas Josué dijo a los 2 hombres que habían reconocido la tierra; entrad en casa de la mujer ramera, y haced salir de allí a la mujer y a todo lo que fuere suyo, como lo jurasteis. Mas Josué salvó la vida de Rahab la ramera, y a la casa de su padre y a todo lo que ella tenía; y habitó ella entre los Israelitas hasta hoy por cuanto escondió a los mensajeros que Josué había enviado a reconocer a Jerico.

Durante el ministerio terrenal de Cristo, vemos el mismo principio en efecto en lo que Cristo hacía con un centurión Romano.

LUCAS 7:2-5 & 10 Y el siervo de un centurión, a quien éste quería mucho, estaba enfermo y a punto de morir. Cuando el centurión oyó hablar a Jesús, le envió unos ancianos de los Judíos, rogándole que vinieron a Jesús y le rogaron con solicitud diciendole: Es digno de que le concedas esto; porque ama a nuesta nación y nos edificó una sinagoga…… Y al regresar a casa los que habían sido enviados, hallaron sano al siervo que había estado enfermo.

Es claro que éste Gentil ha bendecido a Israel en una forma muy tangible construyendoles una sinagoga. En respuesta, su necesidad fué hecha con la bendición de Cristo Jesús.

Probablemente, el ejemplo más significativo de la bendición de los Gentiles se basa en como trataban a Israel. Se encuentra en la separación de naciones, un borrego y una cabra en el retorno de Cristo para establecer su reinado, (ver Mateo 25:31-46).

En éste pasaje, los Gentiles son: o bienvenidos al reino o expulsados a un fuego eterno basados en como trataron a Israel durante el periódo de tribulación. Desde luego que éste es el último desempeño de la promesa de Dios a Abram.

Hoy, sería imposible para Dios bendecir a América basandose en nuestro trato con Israel. En los ojos de Dios, no hay un Israel hoy, o Judío o Gentil.

GALATAS 3: 27-28 Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo de Cristo estáis revestidos. Ya no hay Judío ni Griego; no hay esclavo ni libre, no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.

Debemos notar que cuando decimos que no hay Israel en los ojos de Dios, no queremos decir que Dios no se da cuenta que la nación de Israel existe. Lo que queremos decir es: Que la bendición de Dios no está atada a la identidad de Israel como nación. Por ejemplo: Los versos mencionados anterirmente no están diciendo que no hay hombre o mujer hoy en día. Las bendiciones de Dios no están de ninguna manera atadas a la identidad de la nación de Israel, tampoco debe estar atada a la nación de los Gentiles.

La Bendición del Cuerpo de Cristo

¿Si la Bendición hoy no se basa en ser parte de una nación o trata a cierta nación en un modo particular, entonces, cómo recibimos bendición? ¿Cómo podemos recibir la bendición de Dios?

En el capítulo uno del libro de Efesios, Pablo explica donde radíca nuestra bendición:

EFESIOS 1:3-7 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo. Según nos escogió en él antes de la fundación del mundo para que fuésemos santos y sin mancha delante de él. En amor habiéndose predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptados en “el Amado” en quién tenemos redención, por su sangre, el perdón de pecados según las riquesas de su gracia.

En esta era de Gracia, nuestra elección, nuestra adopción, nuestra aceptación, nuestra redención, nuestro perdón, desde luego todas nuestras bendiciones, residen en la persona de Cristo. Nosotros vamos a esa bendición siendo uno en Cristo. Nuestra identificación con Cristo, las bendiciones que nos dá es el tema que flota atravez de la Epístolas de Pablo.

ROMANOS 8:32 El que no escatimó ni a su propio hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿Cómo no nos dará también en él todas las cosas?

2 CORINTIOS 5:21 Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.

FILIPENSES 3:9 Y ser hallado en él no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe.

COLOSENSES 2:9-10 Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la deidad y vosotros estáis completos en él que es la cabeza de todo principado y potestad.

Claramente, la fuente de nuesta bendición hoy en día, no es ser parte de una nación, es por medio de ser uno en Cristo y ser parte de la Iglesia, el Cuerpo de Cristo.

Sólo nos queda contestar una pregunta: ¿Cómo podemos ser parte del Cuerpo de Cristo? La buena noticia es que para ser parte del Cuerpo de Cristo, no toma absolutamente ningún esfuerzo de nuestra parte. Todo lo que debemos hacer es poner nuestra fe en lo que Cristo ha hecho por nosotros.

1 CORINTIOS 15:3-4 Porque primeramente os he enseñado lo que asi mismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y que fué sepultado y que resucitó al tercer día conforme a las escrituras.

ROMANOS 5:1-2 Justificados, pues por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesuscristo; por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.

Creyendo en la obra terminada de Cristo en el Calvario nos hace parte del cuerpo de Cristo y nos dá acceso a las bendiciones de Dios en Cristo Jesús nuestro Señor.

CONCLUSION: La bendición de Dios en América

Dios no está bendiciendo a América o a ningún otra nación, en la Era de la Gracia, como cuando bendijo a Israel en tiempo pasado. Hoy Dios está bendiciendo a los que vienen a El por fe en Cristo. Mientras que esos creyentes proclaman un mensaje de gracia, sería sin lugar a duda que produciría un efecto e impacto en la sociedad y cultura de esa nación. Esto, es diferente de la directa, bendición supernatural que Dios derramó en Israel. La Bendición de Dios hoy se encuentra en la persona de Cristo. Si queremos que los ciudadanos de nuestra nación sean bendecidos, debemos entonces proclamar el evangelio de la gracia de Dios. Creyendo ese mensaje de salvación es el único camino a la bendición hoy.